Los medios visuales con los que convivimos y experimentamos han abierto nuevas propuestas de comunicación, relación y aprendizaje cuestionando el cambio de ese mensaje transformado por el medio. Las transformación de las prácticas culturales no solamente está dejando su impronta en el mundo académico sino que tienta su transformación. Seguro que con menos intereses de por medio y más centrada en los objetivos originales, la academia se dejaría tentar más fácilmente. Mientras tanto, las propuestas se abren camino en una virtualidad con sus propias normas con más lógica que los criterios objetivos de algunas agencias de evaluación de la calidad.
Edgar Gómez Cruz invita a «ser valiente» como algunas de estas propuestas y ha iniciado un listado en su post «Visualidad, publicaciónes, artes y experimentación (pequeña lista en contrucción)». Puede resultar interesante para investigadores sociales, antropólogos y artistas que estén interesados en la imagen tanto como objeto o medio. Y la investigación educativa si no es por activa, mínimo por pasiva, debería estar al tanto de todo esto para mantener una de sus razones de ser.